¿Qué es la ginecomastia?
Si bien en ocasiones se puede atribuir al uso de determinada medicación o a la herencia genética, la ciencia aún no ha logrado determinar con suficiente exactitud las causas por las cuales los pechos de los hombres pueden llegar a adquirir un tamaño demasiado grande. Pero lo cierto es que hay estudios que indican que este tipo de afección –llamada ginecomastia- en mayor o menor grado se hace presente en la mitad de la población masculina. Padecer ginecomastia puede ser en un verdadero trastorno para cualquier varón. Puede darse en uno o ambos pectorales, para convertir a esa zona del cuerpo en algo que no se quiere mostrar bajo ningún punto de vista. Por fortuna, la cirugía estética propone una solución a través de una intervención que tiene como objetivo una quita de tejido grandular, contenido graso y exceso de piel, para derivar en un pecho más acorde a lo deseado, es decir plano y dotado de firmeza.
La técnica que el cirujano pondrá en juego frente a un caso de ginecomastia tendrá que ver con las características que exhiba el paciente. Si el escenario presenta como principal problema una cantidad excesiva de tejido grandular, dicho sobrante será extraído vía quirúrgica, procedimiento que puede estar acompañado por una liposucción para eliminar la grasa que aparezca en la zona. Este tipo de intervención se lleva adelante a través de una incisión que se hace en el contorno del pezón. Ahora, si la situación que muestra la persona que se somete a una cirugía de reducción mamaria masculina es de un exagerado contenido adiposo en la zona pectoral, se apelará directamente a una liposucción que se ejecuta mediante un muy pequeño corte. Al margen de la variante técnica que se emplee, puede surgir también la necesidad de una quita de piel.
Quedará en decisión del cirujano estético actuante si un caso de ginecomastia debe tratarse con anestesia general o si es posible proceder con la siempre menos lesiva anestesia local, la cual se acompaña con sedación.
Un procedimiento de ginecomastia en Rosario estándar puede demandar entre dos y tres horas de intervención por parte del equipo quirúrgico, dependiendo del grado de complejidad que presente cada paciente y también de la técnica con que se procede.
El hombre que accede al tramiento quirúrgico de un caso de ginecomastia en Rosario puede llegar a experimentar algunas molestias por un período que no suele extenderse más allá de unos pocos días pasada la cirugía. Por supuesto que el profesional actuante atenderá la situación prescribiendo los medicamentos paliativos que considere necesarios. Como una de las principales recomendaciones postoperatorias, se indicará el uso de ropas que ejerzan cierto grado de presión sobre la zona pectoral, para atenuar cualquier movimiento. Esto deberá tenerse en cuenta por, al menos, una semana. Otra cuestión a tener en cuenta será la de evitar encuentros sexuales por una quincena. También actividad física que requiera cualquier tipo de esfuerzo. Se estima que, en definitiva, lleva un tiempo aproximado de un mes el retorno a la rutina cotidiana.
En caso que usted se encuentre atravesando una situación de ginecomastia y considere la posibilidad de acceder a una cirugía de reducción mamaria masculina en Rosario, sepa que puede contar con nuestro equipo de profesionales médicos para atender su necesidad, evaluar su escenario y acompañarlo en la búsqueda de soluciones.